La comunidad celebró la apertura de este espacio que promete ser un epicentro de experiencias y crecimiento para las y los sansanos.

“Este espacio nace con el fin de reunir a las personas y resaltar la riqueza que tiene las relaciones interpersonales, que son un pilar fundamental de la sustentabilidad, de la fortaleza de las instituciones”, expresó la autoridad universitaria.
El presidente de la Federación también se dirigió a los presentes, expresando su agradecimiento por el esfuerzo dedicado para alcanzar este logro, haciendo hincapié en el trabajo colaborativo llevado a cabo con la dirección de sede, que ha permitido proporcionar espacios a los estudiantes para fomentar y enriquecer su vida universitaria.
Tras el tradicional corte de cinta, se presentó un render en el cual se detallaron las próximas etapas del proyecto, destacando instalaciones como una cancha de rayuela, una mesa de pingpong y áreas verdes destinadas al disfrute y la participación de la comunidad.
Finalmente, para simbolizar el crecimiento y la sostenibilidad, se llevó a cabo la plantación de dos árboles nativos: un robusto pelú y un vital canelo. Estos árboles representan la coexistencia entre la experiencia y dedicación de funcionarios y docentes, personificada en el pelú, y la energía y aspiraciones de los estudiantes, reflejada en el canelo.




