En terreno y junto al Rector Darcy Fuenzalida, el personero de gobierno pudo constatar el cumplimiento de los protocolos de seguridad, y verificar la capacidad de esta casa de estudios para generar un sólido polo de desarrollo académico en esta comuna de la Región Metropolitana.

Se trato de una visita cuyo principal objetivo fue tomar conocimiento por parte de la autoridad del cumplimiento de los protocolos sanitarios en el contexto de COVID 19. Tal como señaló el subsecretario de Previsión Social, Pedro Pizarro, “hemos estado difundiendo la ley que nos permite un retorno a una actividad gradual de forma segura para la salud y vida de los trabajadores y aquí, claramente se ha notado que se están adoptando todas las medidas. Se están cumpliendo los protocolos de temperatura, implementos de protección y todo aquellos que es lo más importante para cuidar la vida de los trabajadores. He conversado con ellos y se sienten tranquilos y protegidos por su empleador”, explicó el subsecretario.
Así lo reafirmó también el Rector de la USM, Darcy Fuenzalida, quien valoró el estado de avance y la responsabilidad con la que esta empresa ha cuidado la seguridad de los trabajadores. “Esta obra lleva un avance significativo de acuerdo al programa principa, sin retrasos, aun en condiciones de pandemia. La constructora Bravo-Izquierdo ha demostrado ser una empresa muy responsable con sus trabajadores con protocolos muy exigentes, lo que da la seguridad necesaria para que ellos estén protegidos del Covid-19”, dijo.
Dio especial énfasis a que esta obra forma parte del crecimiento de la casa de estudios. “Estamos ampliando nuestras instalaciones. Es una gran obra de más de 15 mil m2 y esperamos de aquí a un año contar con este edificio y entregarlo al Campus San Joaquín. Estoy satisfecho de ver que el trabajo está avanzando responsablemente. Además, estuve conversando con los trabajadores y estoy muy contento del compromiso con el que están sacando adelante este proyecto”, sostuvo.

Cabe mencionar que este nuevo edificio que será parte del campus San Joaquín contempla la construcción de 16 mil M2, con 64 oficinas, más de 50 salas y diversos laboratorios disponibles que permitirá albergar a más de 1500 personas. “Me voy muy satisfecho de que el trabajo está avanzando responsablemente. Tuve contacto también con los trabajadores que muestran su motivación por este proyecto con los protocolos de seguridad”, concluyó.
Este proyecto, aprobado por el Consejo Superior de la Universidad y el de mayor inversión en los últimos años, forma parte del plan maestro de infraestructura institucional y está diseñado bajo aspectos de sustentabilidad en materia de eficiencia energética, lo que permitirá postular al edificio al sistema de evaluación y certificación de Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental (LEED, por sus siglas en inglés).